15. Pol

El mundo se para y no ha cambiado nada.

Moly abre los ojos, Pol está a su lado y le pregunta Qué tal ha ido, ahora sabe que vive en un sueño, que todo el bucle que empezó pareciendo su casa no es más que la prisión donde Pol la encerró gracias a su chip, nadie iba a matarla porque ella ya estaba muerta.

Nunca fue humana y lo supo desde el principio, nunca sintió nada, pero Pol sí, el era el último humano o la última ficción que lograría ver antes de convertirse en una ilusión.

14. No es tu culpa

Una vez dejando claros los límites entre ellas, deciden emprender el viaje juntas. Con una nave todo será más fácil. Ahora Moly podrá ahorrarse los viajes espaciales y cambiarlos por uno solo, sin embargo, deberán atravesar las líneas de vuelo, los drones, y los satélites. Una tarea nada fácil para quien sabe lo que es vivir en un mundo interconectado. Al salir de ‘Mindlost’, atraviesan el cinturón de Júpiter, esto les lleva un día y medio, periodo de tiempo en el que Moly se da cuenta de que por primera vez aquello que había echado en falta, el amor, los sueños y las metas, habían aparecido en su vida de la forma más real posible gracias a Tris.

Sus sonrisas, miradas, caricias que sobrepasaban los límites, se empezaban a convertir en algo normal. Sin embargo, había algo extraño en todo esto. Moly se había fijado desde el principio que el nombre de la nave no era nada más ni nada menos que Sane, el nombre del proyecto que andaba detrás de acabar con ella y con su humanidad.

Esto fue algo que al principio dejó pasar, pero conforme iban pasando los días y se acercaban más a su paso por Marte, más le chirriaba pensarlo, además es cierto que para Tris no era más que un juguete, ella también era un cyborg, Moly no esperaba encontrar mucha humanidad en ella, a pesar de que el instinto primario de la especie estuviese radiando constantemente en ella. Entonces lo supo hormonas.

Desde que llegó allí había estado bastante ausente, centrada en Tris. Decidió ir al depósito de comida y medicina, y ahí estaban, inyecciones de hormonas abiertas y listas para ser introducidas en la piel, esta vez no iba a pasar por el aro.

Moly salió corriendo, incomprendida sin saber por qué todo este engaño, de donde salía tanta incertidumbre… Apretó el botón de la compuerta de la nave, y saltó.

13. Tris

Nada más alcanzar la calma de nuevo la primera y única palabra que resonaba en toda la instancia fue Modifícame. Entonces su salvadora de pelo plateado se volvió hacia ella y le dijo en tono severo ‘Soy Tris, vayamos a ello’.

Entonces Moly de cabello rubio, piel pálida y ojos negros. Pasó a tener la piel oscura, el pelo rojo fuego  y los ojos verdes azabache. Ahora, también podría respirar libremente fuera de la atmósfera. Este proceso llevó dos días con lo que, la búsqueda de los rastreadores a la atrapa sueños había comenzado hace 75 horas.

Al terminar el proceso, Tris miraba con ojos desafiantes a Moly, entonces Tris lo dejó claro, Estás lista, sin embargo me gustaría acompañarte, entonces Moly dando su negativa sintió como algo se retorcía en su interior al ver como Tris se acercaba cada vez más a ella con una mirada de deseo. Tris se abalanzó contra ella, hasta dejarla sin ropa, pudiendo ver su nueva creación al descubierto, estaba orgullosa.

Tris metódica y con carácter sabía lo que deseaba en la vida, y es que nada le daba más placer que disfrutar de sus creaciones, era como un guru sexual. Sin embargo Moly, en contra de las modificaciones y la pérdida de humanidad, e incluso siendo víctima y cómplice de su pérdida de humanidad, no quería que Tris la acompañase, a pesar de vivir una de las mejores experiencias de su vida en tan solo una hora consciente al lado de Tris.

12. Modifícame

Entonces fue cuando aparecieron las llamadas abejas de la libertad, Moly al ver estos pequeños insectos robotizados dio gracias a Pol por sus historias, sin ellas no habría sido capaz de reconocerlas. Estas se posaban en su piel y con una pequeña inyección de su veneno, podías ver como se iluminaban en tu piel las letras que llevaban a la dirección escondida de los cambia pieles.

Logró leer sin dificultad alguna ‘detrás de tí’, y más que una dirección parecía como si alguien se le fuera a abalanzar detrás de ella. Rápidamente suspiro y se giró, qué le pasaría al hacerlo.

Un destello a lo lejos dejó ver que un misil iba directa a ella, sin tiempo de reacción, todo se volvió blanco, un pitido resonaba en sus oídos, algo le decía que aún seguía viva. Respiro con fuerza, se rasgó los ojos, y sintió como si alguien la llevara en brazos, entonces pudo reconocer la cara de una mujer joven.

Cuando todo se calmó en la cabeza de Moly habían llegado a una especie de nave que estaba sintetizada con el color del desierto, entonces la joven dejó a Moly en una especie de cama hecha con sabanas liadas en el propio suelo y cerró la compuerta.

11. Mindlost

Sabía por Pol, que esta persona se escondía en el origen destructivo del universo, el llegar era la parte más difícil, tenía que desplazarse hasta la base espacial de Júpiter, llegar a Marte y desde allí coger la lanzadera que se comunicaba con la Tierra.

En principio debería modificarse, llegar a ser otra persona le daría pase a  lo que realmente quisiera.

Por ello, fue a la parte más fea de Júpiter donde los recién llegados no eran ni bien recibidos ni habían sido invitados a la nueva conquista. Para ello Moly tuvo que utilizar el implante para poder respirar, no era ni muy cantoso ni tampoco pasaba desapercibido, parecido a una máscara, daba la sensación de que iba disfrazada, además debía inyectarse un complemento que hiciese que su piel mortal no se desvaneciese con el gélido frío espacial.

Salió de la estación con un pase de 24 horas, medio día, si después de ese tiempo no aparecía quizás mandarían a rastraedores a su caza, nunca había deseado jugar con esa suerte, pero ahora era su elección.

Al salir, cogió un coche que la llevaría a un punto cercano a ‘Mindlost’, así era el nombre con el que los ricos llamaban a los restos de su sociedad, un barrio o un tugurio quizás. Al llegar, debería pasar por calles que no eran más que desierto y cuatro muros de cemento, que iban a fabricar en un planeta inóspito unos cuantos robots sin alma, los colores no abundaban.

10. Parecerse a mi

La búsqueda comienza, pero primero debe deshacerse de Pol. Un palpito le hace marearse nuevamente, la sala se cubre de rojo y Pol es humano…

No, ha sido un sueño, se repite una y otra vez, pasados cinco largos minutos de shock, recupera su identidad y recogiendo todo lo que queda de Pol, no hay sitio donde esconderlo, así que decide llevarlo a su tubo de descanso y manutención. Mete los restos y el tubo se empieza a llenar.

Ahora deberá buscar a alguien más, hoy quiere salir.

Hace dos años que Moly recuerda haber salido por última vez, fue un leve paseo en coche espacial por el círculo terrestre, quería ver la Tierra. Pero esta vez no quería salir del todo, necesitaba quedarse dentro y salir a la luz de quien le había enviado el mensaje.

Entonces, ¿dónde podría ir?, quizás… es obvio. Quién está detrás del proyecto Sane, por qué tiene tantas ganas de destrozar la humanidad, de tener encerrada la última parte humana en lo más oscuro, de querer acabar con ella.

No sería nada placentero pero debía volver a la Tierra donde se escondía la verdadera mente madre de toda esta locura.

9. Soy parte de ti

Los restos de lo que fue Pol quedan esparcidos por la sala, una cara desconsolada parece unir todas las partes de lo que quedan de él.

Moly sabe que no fue él, el mensaje viene de alguien más, pero que hay detrás de esta sala, su cubículo y los espacios comunes que no son más que una sala de estar para trabajadores y un bar que abre a media noche.

Estaba segura de que Pol tenía más información, de que los chip que le implantaban pasaban de mano en mano, surgiendo de una mente retorcida y repugnante.

Así es que Moly no tarda ni dos minutos en tardar de plantearse esta idea y decide coger el chip de lo que fue Pol, necesita saber más.

Pero a parte de Pol quien más podría ayudarla, quién podría cederle un voto de confianza a esta adolescente rodeada de adultos que rozaban la vejez. Y es que en las salas comunes nunca había tenido demasiada relacion con nadie, ni nadie había decidido atreverse a conocerla, le temían, no querían ser tocados y que su vida cambiara gracias a un desliz.

8. Abre los ojos

Cierra los ojos, respira, la música de ambiente suena y sus ojos doblegados al universo se abren de par en par, como un impulso inmediato, resuenan en sus pupilas las líneas horizontales de pura energía. Sus capacidades cerebrales han ascendido al setenta por ciento, cuando de repente, recibe el mensaje: ‘Estás muerta’.

Al leerlo, Moly cae repentinamente desplomándose y sufriendo un shock cerebral, empieza a convulsionar. No pueden perderla. Pol saca una inyección de su esternón y la clava en la cabeza de Moly de forma violenta, la reación de Pol al ver que no sucede nada y que las convulsiones aumentan es desgarradora, rompe a llorar.

Entonces de forma extraña Moly recupera a consciencia, el chip cae al suelo y aún mareada por el impacto, mira y es consciente de que Pol había sido quien le había proporcionado el mensaje. Sin pensarlo, automáticamente se desprende una cuchilla de su brazo izquierdo y se abalanza contra Pol, el cual se deja despedazar sin saber qué es lo que le para a detenerla y a detener su llanto.

Después de haber terminado de despedazar a Pol, le cambia el semblante al ver lo que había hecho y ver como un robot había conseguido lllorar.

7. Misión

Desconoce su pasado, vive en un sueño constante que le muestra su mente pero que no es palpable, lo parece, sensación engañosa de vida, era un cuento.

Nadie jamás le había contado un cuento, nadie jamás la había abrazado, solo sabía que todo eso existía fuera de un trabajo lleno de manipulaciones incesantes que no llevan a ninguna parte, más que al control magnánimo bajo una mente que quiere el progreso disfrazado de destrucción.

Pol sin embargo, había estado ahí desde que cayó y fue encontrada por rastreadores que instigan a pueblos a desaparecer o unirse a ellos. Era un muchacho, de apariencia humana pero, seguía siendo un robot, sin sentimientos, doblando la edad de Moly, le hacía de guía y aunque no lograba entender muchas veces a Moly, había una pequeña parte que le hacía click cuando hablaban, él también deseaba saber que era amar, aunque supiese en el fondo que era imposible.

Así pues, este mismo entró justo al levantarse Moly para llevarla de nuevo por el corredor a su sala de trabajo, el camino fue sin palabras, solo con miradas se entendían no hacía falta nada más.

La sala estaba oscura como de costumbre, solo el ventanal que había por paredes dejaban a las estrellas entrar con su luz, en medio de la sala, un sillón de color amarillo, el favorito de Moly, una vez se sienta Pol le inserta en chip justo en la nuca. Este le permite saber a Moly cuál es la misión de cada día, siempre un viaje con misión al cambio, pero ¿qué tendría que cambiar esta vez?

6. Recuerda

Moly solo es una adolescente que ve el pasado a través de su mente y quiere volver atrás, la ambición que mueve a esta chiquilla es un incesante revoloteo de mariposas en su estómago, es jugar con sus amigos en un parque, es no ser adulta en un cuerpo que parece en crecimiento, pero que lleva una armadura forjada por los que le rodean.

Se encontraba bastante cansada la tarde del año 3019, cuando al entrar en su cúbiculo, uno de los miles que el estado procesaba para sus trabajadores, cuando miró a las paredes y solo encontró el gris, no era la primera vez, desde que tenía consciencia solo estaban esas frías paredes a su alrededor.

Un lugar de descanso o ¿no era más que el vacío representado a su alrededor?

Cansada, se tumbo en el tubo de descanso y manutención cerró los ojos y se paró el tiempo otra vez.

Solo encontraba descanso en los sueños que no recordaría cuando el tubo se hubiera vaciado de líquido y le hubiese dejado respirar de nuevo el aire artificial que le rodeaba.

Tras dos horas programadas, el tubo comenzó a vaciarse, y el aire de nuevo le dejó respirar eran las 25 horas del día. De un sobresalto parecía que empezaba a llorar pero no podía, los días le eran mejor cuando tenían 24 horas y no 50, eran mejores los días en que sus padres habrían vivido.

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